Minimización de condensados en cámaras de agua mediante ventilación forzada

Gráfico del sistema / Esbozo del funcionamiento con elementos técnicos para la ventilación forzada de cámaras de agua
Gráfico del sistema / Esbozo del funcionamiento con elementos técnicos para la ventilación forzada de cámaras de agua

Las instalaciones de filtro de aire de HUBER logran un grado de separación de > 99,95 %

En el techo y las paredes de algunas cámaras de agua se forman gotas de condensado. Esta aparición debería evitarse básicamente mediante un buen aislamiento de techos, techos o bóvedas oblicuos o a través de recubrimientos especiales. De todos modos, con frecuencia, los métodos estáticos no son solución para este inconveniente.

Ya en el año 2011 publicamos un informe acerca de las experiencias operativas con el reequipamiento de una ventilación forzada en el depósito alto de Utzenaich en Innviertel, Austria.

El depósito alto instalado en el año 2007 con dos cámaras rectangulares con capacidad de 250 metros cúbicos cada una, se erigió de acuerdo con altos estándares de higiene. Un revestimiento de acero fino, un techo oblicuo, así como una entrada de aire con filtro de aire integrado y un canal enterrado con pendiente hacia la refrigeración de aire y la descarga de condensados eran algunas de las características del equipamiento.

Los modelos L251 hasta L662 de las instalaciones de filtro de aire de HUBER filtran el aire con una clase de filtro HEPA H13 (HEPA = High Efficiency Particulate Filter o filtro de materias suspendidas). La clase de filtro H13 se corresponde con un grado de separación (valor integral) de > 99.95 % de acuerdo con la Norma DIN 1822:2011. Se trata de un valor estándar para quirófanos.

Además del filtro HEPA H13, los modelos L361 hasta L662 cuentan con un filtro fino clase M5 (conforme a EN 779:2012) que actúa como filtro previo. Está claro: Una cámara de agua, cuyo entrada de aire se desarrolla a través de una instalación de filtro de aire de HUBER, respira un aire con una pureza equivalente a la de los quirófanos.

Pero: En un quirófano trabajan personas. Esto significa que el aire se inhala y exhala, por lo que por otra parte llega a un estado de consumo. Es por esto que estas construcciones disponen de entradas y salidas de aire.

Este es el ejemplo a seguir pero en una medida ajustada a la necesidad. Tal como las personas en el quirófano, la superficie del agua también despide humedad hacia el ambiente. Si en la cámara de agua se generan condensados, es porque además de la instalación de filtro de aire se precisa una ventilación forzada (mediante un ventilador) y una salida de aire.

Utzenaich: En dirección de flujo y en orden sucesivo: Placa de conexión a la pared dentro de la persiana de seguridad (exterior, no representado), tubería de aspiración de aire hacia ventilador radial en tubo con transformador de 5 fases para ajuste d
Utzenaich: En dirección de flujo y en orden sucesivo: Placa de conexión a la pared dentro de la persiana de seguridad (exterior, no representado), tubería de aspiración de aire hacia ventilador radial en tubo con transformador de 5 fases para ajuste de número de revoluciones, instalación de filtro de aire L251 (por encima del respectivo presostato diferencial), válvula de seguridad, modelo 170-1 (roja, presión de accionamiento de aprox. 1.000 Pa)

En el depósito alto de Utzenaich, el primer intento por eliminar la formación de condensados mediante ventilación forzada resultó exitoso. En los años siguientes se montaron otros depósitos con una ventilación forzada como agregado a los filtros de aire ya existentes. La formación de condensados logró minimizarse en todos lados. Otra ventaja de esta medida es que la totalidad del sistema se halla en una leve sobrepresión a partir del ventilador, por lo que será seguro que no entrará aire no filtrado en la cámara de agua.

No se conoce la evolución de la humedad relativa del ambiente sobre la altura entre superficie del agua y techo de la cámara de agua. Pero también tiene poco sentido medir este perfil, dado que las condiciones son distintas en la mayoría de los casos y, por lo tanto, no se puede aplicar una única solución para todos.

Entretanto, dado que estas instalaciones se empleen hace 15 años y cada vez con mayores exigencias, el montaje de una instalación de filtro de aire debería tornarse en una modificación conforme al estado de la técnica, a pesar de que aún no existan disposiciones vinculantes a este respecto.

En caso de que en una reconstrucción o nueva construcción se tomen todas las medidas arquitectónicas necesarias conforme al estado de la técnica o se ejecuten todas las medidas realizables en el marco de costes justificable para la prevención de formación de condensados al emprender un saneamiento, y, no obstante, aparezcan problemas de condensados, alcanzará con saber que mediante la adición de una ventilación forzada (ventilador con aprox. 150 – 250 Pa de aumento de presión en el ámbito operativo) y una instalación de filtro de aire (en tanto aún no se cuente con una), así como un tubo de descarga de aire al exterior con una válvula de cierre de apertura sencilla (Δp ca. 80 – 120 Pa) o bien una salida de aire al exterior definida (no es necesario que sea un tubo) será altamente probable que se le pueda poner un freno a la formación de condensados.